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YaHWéH salió a buscar entre las naciones mediante la misión apostólica y la Iglesia «un pueblo para Su Nombre» (Hech 15, 14).  Un Pueblo Santo que tendrá un rol a cumplir en el mundo venidero según leemos en Daniel 7, 27:

 

entonces se dará al pueblo santo del Altísimo la soberanía, el poder y la grandeza de todos los reinos bajo el cielo. El reino del Altísimo permanecerá para siempre y todos los gobernantes le servirán y obedecerán

 

Declaración solemne si las hay. Aquí se habla de un pueblo que recibirá dominio sobre todas las naciones del y sabemos que a pesar de ser UN Pueblo sera multinacional en referencia a las naciones de hoy: «gente de todo pueblo, tribu, lengua y nación» (Ap 5,9). Esto excede a una salvación meramente personal y es lo que hay que discernir ahora, cuando sentimos cercano el fin de este siglo. Y una forma de entender este tránsito son estos pasajes en los que se nos habla de un velo que será quitado, hoy como induividuos y mañana como Pueblo Santo presenciaremos lo mismo sobre todos los pueblos purificados por el Segundo Pentecostes:

 

⇒ plano individual –actual-:

 

pero cuando una persona se vuelve al Señor,
el velo se le quita. Porque el Señor es el Espíritu;
y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad.
Por eso, todos nosotros, ya sin el velo… somos
como un espejo que refleja la gloria del Señor…
2 Corintios 3, 16-18

 

⇒ plano mundial –venidero-:

 

en el monte Sión, el Señor todopoderoso
preparará para todas las naciones un banquete
con ricos manjares y vinos añejos…
En este monte destruirá el Señor
el velo que cubría a todos los pueblos,
el manto que envolvía a todas las naciones”
Isaías 25, 6-7

 

quiere decir que con la conversión personal se nos quita el velo que entenebrece nuestro entendimiento hoy adquiriendo acceso a la «mente de Cristo» (1 Cor 2, 16). Pero cuando se establezca el Reino/Triunfo de la Iglesia en la Sión en Gloria venidera se quitara el velo que actualmente cubre el entendimiento de las naciones. Y entonces andarán al resplandor de Su Gloria como leemos en Isaías 60, 2-3:

 

una oscuridad negra… cubre
… las naciones de la tierra,
pero la gloria del Señor se
levanta y aparece sobre ti.+
Todas las naciones vendrán
a tu luz

 

(y tambien en Ap 21, 24). Hoy no vemos a las naciones andar a Su Luz y es evidente que sin el levantamiento del velo que opaca su entendimiento la paz mundial es imposible. Esta solo puede venir de la Mano de ‘YaHWéH Justicia Nuestra’/ YaHWéH Tsidkenu en el Monte Sion glorioso, Su Reino.

 

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