esperamos con mucho anhelo que él regrese… Él tomará nuestro débil cuerpo mortal
y lo transformará en un cuerpo glorioso, igual al de él
Filipenses 3, 20-21

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Viene de:
Acápites del Retorno (I)
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↬ pasajes que hablan de Israel y Judá:

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En Jeremías 33, 14:

 

he aquí vienen días… en que yo confirmaré la buena palabra que he hablado a la casa de Israel y a la casa de Judá.

 

En Jeremías 30, 3:

 

porque, he aquí, vienen días… cuando restauraré el bienestar de mi pueblo, Israel y Judá… También los haré volver a la tierra que di a sus padres, y la poseerán

 

En Jeremías 3, 16-18:

 

cuando una vez más la tierra se llene de gente… ya no desearán más ‘los viejos tiempos’ cuando poseían el arca del pacto del Señor… En aquel día, Jerusalén será conocida como ‘el Trono del Señor’. Todas las naciones acudirán a Jerusalén para honrar al Señor… En aquellos días la gente de Judá y la gente de Israel volverán juntas del destierro… Regresarán a la tierra que les di a los antepasados de ustedes como herencia perpetúa

 

En Oseas 1, 11:

 

entonces los pueblos de Judá e Israel se unirán, elegirán un solo líder y regresarán juntos del destierro. Qué gran día será —el día de Jezreel— cuando Dios plantará de nuevo a su pueblo en su tierra.

 

En Jeremías 33, 7-9:

 

haré volver los cautivos de Judá y los cautivos de Israel, y los restableceré como al principio. Los limpiaré de toda su maldad… Esta ciudad me será por nombre de gozo, de alabanza y de gloria entre todas las naciones de la tierra, cuando oigan… el bien que yo les hago

 

 

la mención de las dos casas –Israel y Judá- es la preferente del profeta Jeremías así como Isaías se refiere solo a ‘Jacob’ aludiendo a la ‘casa de Israel’ desterrada entre las Naciones. Y en la última cita se hace referencia a una constante de la profecía del retorno: las Naciones se asombrarán/maravillarán por la bendición sin medida que Dios/Elohim derramará sobre el remanente/Pueblo Escogido/Pueblo Santo/ISRAEL DE DIOS/JEZREEL en su retorno a la Sión venidera. Esto demuestra que no se está cumpliendo ahora el cuerpo principal de esta profecía con el retorno de los judíos a la hoy llamada ‘Palestina’ aunque esto es una señal. Ellos –que en su enorme mayoría son ateos o no-religiosos- son motivo de permanente y global encono, exceptuando a las naciones de cuño cristiano. Son una piedra de tropiezo como menciona Zacarías 12, 3 más que motivo de alabanza entre las Naciones. Quiere decir que debemos esperar otro retorno que sea el cumplimiento cabal de la profecía de retorno de Israel y Judá -no solo de la descendencia de Judá- a la tierra de sus ancestros. Veamos ahora pasajes que se refieren a Efraín –que ya mencionamos pero son sustancia y fundamento del evangelio; se trata casi de un dialogo entre Efraín y el Padre celestial:

 

En Jeremías 31, 18:

 

he oído los gemidos de Efraín: –Gravemente me has castigado; pero yo lo necesitaba… ¡Vuélveme otra vez a ti y restáurame, pues sólo tú eres el Señor, mi Dios! Del Señor me alejé, pero tuve que lamentarlo. Me di golpes por mi necedad. Me dio enorme vergüenza todo lo que hice en mi juventud

 

En Jeremías 31, 20:

 

¿no es Efraín mi hijo amado? ¿No es un niño encantador? Pues siempre que hablo contra él, lo recuerdo aún más; por eso mis entrañas se conmueven por él, ciertamente tendré de él misericordia–declara el SEÑOR.

 

 

↬ pasajes que mencionan a la ‘hija de Sion’:

 

En Isaías 4, 2-4:

 

aquel día, el Retoño del Señor será hermoso y glorioso. El fruto de la tierra será el orgullo…de… los sobrevivientes de Israel. Los que queden… serán un pueblo santo, los que sobrevivan… y estén registrados entre los vivientes (nota: ¡aquí se habla del Libro de la Vida!). El Señor lavará la inmundicia de las hijas de Sion

 

En Isaías 62, 10-12:

 

-¡preparen la carretera para el regreso de mi pueblo!… y levanten una bandera para que la vean todas las naciones. El Señor ha enviado… mensaje a cada país: «Díganle a la hija de Sión: –Miren, ya viene su Salvador… Serán llamados “El pueblo santo” y “El pueblo redimido por el Señor”

 

En Zacarías 2, 10:

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canta de júbilo y alégrate, oh hija de Sion; porque he aquí, vengo, y habitaré en medio de ti –declara el SEÑOR
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En Jeremías 31, 2-4:

 

hace tiempo el Señor le dijo a Israel: «Yo te he amado, pueblo mío, con un amor eterno… Yo te reedificaré, mi virgen Israel. Volverás a ser feliz y con alegría danzarás con las panderetas

 

hermosas y edificantes citas que se refieren al retorno de los cristianos a la Sión venidera. Sigamos con los que aluden a un nombre que generalmente nos parece extraño pero está en nuestro futuro:

 

 

↬ pasajes que hablan de Jezreel (‘Dios Siembra’) y el Señor que siembra y cosecha:

 

En Oseas 2, 21-22:

 

en ese día, yo responderé —dice el Señor—. Le responderé al cielo cuando clame por nubes, y el cielo contestará a la tierra con lluvia… responderá a los clamores sedientos del grano, de las vides y de los olivos. Y ellos a su vez responderán: “Jezreel”, que significa ¡Dios siembra!

 

En Oseas 2, 23:
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en ese tiempo yo sembraré una cosecha de israelitas y los haré crecer para mí. Demostraré amor a los que antes llamé “no amados”. Y a los que llamé “no son mi pueblo”, yo diré: “Ahora son mi pueblo”. Y ellos responderán: –¡Tú eres nuestro Dios!

 

En Lucas 10, 2:

 

Les dijo: –Ciertamente la cosecha es mucha, pero los trabajadores son pocos. Por eso, pidan ustedes al Dueño de la cosecha que mande trabajadores a recogerla

 

 

El Dueño o Señor de la cosecha es otro nombre o atributo de nuestro Dios/Elohim. Y Jezreel tanto puede referirse a Él como a nosotros que somos Su cosecha de entre las naciones.

 

 

↬ y finalmente pasajes que hablan en general del retorno de los dos remanentes –Israel y Juda-:

 

En Ezequiel 39, 25-28:

 

¡tendré misericordia de todo Israel… Una vez que regresen a su propia tierra… olvidarán la responsabilidad de la… infidelidad que cometieron. Cuando los haga regresar… mostraré mi santidad para que la vean todas las naciones. Entonces mi pueblo sabrá que yo soy el Señor su Dios, porque los envié al destierro y los regresé a su hogar

 

En Isaías 65, 9:

 

mis elegidos poseerán la tierra, mis servidores habitarán allí

 

En Deuteronomio 30, 1-3:
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en el futuro, cuando… estés viviendo entre las naciones a las que el Señor tu Dios te haya desterrado… Si… tú y tus hijos regresan al Señor… entonces… tendrá misericordia de ti y te volverá a reunir de entre todas las naciones por donde te dispersó

 

 

Y si el lector está atento percibirá que este último pasaje es de un libro tan temprano en las Escrituras y en la profecía como Deuteronomio. Y allí se anuncia el plan de tres etapas: destierro-perdón-nueva congregación de Israel a Sión –la marea y contramarea que conmocionó la Historia de las Naciones-. Este proceso entonces estaba/está determinado por YaHWéH y por tanto debe cumplirse infaliblemente. Entonces, atendiendo a la enorme variedad, cantidad y coherencia, de testimonios escriturales -de los que citamos solo algunos- no podemos dudar a pesar de la visión que el mundo tenga de la Historia, que los cristianos/remanente de Israel/tribus de Jacob regresaremos junto a un remanente de Judá a una gloriosa Sion venidera –Sion en Gloria- junto al Gran Rey del mundo venidero YaHWéH Tsidkenu/Cristo Rey siendo protagonistas del hecho más portentoso de la Historia que provocará admiración en las Naciones ¡Aleluya!

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