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Kim jong un ‘domina el clima’
13/12/2017
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13 de junio/2014
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Hacer un relatorio actualizado sobre la persecución de cristianos en el mundo es hoy tarea inabarcable. Los crímenes de Boko Haram en Nigeria se encuentran en la prensa y se comentan solos. Podríamos hacer mención -como cosa nueva y diferente- a la relativa esperanza de tolerancia para los cristianos coptos -que ya fueon atacados y martitizados- a partir de la ascensión a la presidencia de Abdelfatah al Sisi en Egipto, o reiterar el martirio en las regiones ocupadas por los rebeldes islámicos en Siria o señalar la renovación de la amenaza mortal para los cristianos en Irak o el peligro en tantas otras regiones o países en donde ser cristiano significa estar bajo la mira de fanáticos asesinos (y también los ataques sistemáticos a lugares de culto en países como España en donde si bien no existe amenaza física hay un intento constante de descalificación y amedrentamiento público).
Pero lo que hoy queremos destacar es la situación en Corea del Norte adonde el cristianismo es objeto de ataque puro y duro no solamente por los motivos habituales sino para afirmar la adoración de la casta de los Kim exacerbado por el actual candidato a “dios”: Kim-Jong-un. Y muy especialmente sorprende que se vigile al personal diplomático para que no sea “contaminado” ¿Pero en que país este “contagio” parece especialmente peligroso –quizás porque no haya muchos otros destinos diplomáticos que reconozcan al régimen hereditario de los Kim-? Pues asómbrese el lector: en China comunista:
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“En este caso, las órdenes se centran tanto en la detención como en la repatriación de todos aquellos nacionales que puedan tener contacto con las iglesias cristianas en China, tanto oficiales como clandestinas. Según una fuente consultada por la agencia el personal de seguridad del Estado se encuentra en China trabajando para impedir que los visitantes de Corea del Norte estén en contacto con los cristianos. Muchos son empleados activos de consulados, mientras que los oficiales jóvenes de la Oficina de Reconocimiento han sido enviados para hacer arrestos».
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Esto nos habla no solo de la demencia del régimen de Kim-Jong-un, sino del grado de penetración del cristianismo en China. Lea toda la noticia en este link:
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